Tus barras son ahora mis barreras...

Hace algunos días me solicitaron que diseñara una imagen referente a la ley antimigrante; ley que detonó inumerables manifestaciones de protesta, principalmente de la comunidad latina que solo busca “trabajar” para un mejor porvenir.

No soy una experta en el tema, pero no me fue difícil reflexionar y ponerme en los zapatos de nuestros connacionales y demás latinos de todo el continente, para darme cuenta que la vida de millones de personas pende de un delgado hilo de incertidumbre e inseguridad en un país, que por mucho años les abrió sus puertas para el desempeño de los más duros y pobres trabajos; que les permitió a través de los años formar familias y soñar siempre, con un mejor “futuro” del que les ofrecía sus países de origen. Ahora éste, lanzaría una drástica ley de “caza de brujas” que propone TODO menos VIVIR EN LIBERTAD.

La migración debe verse no como un problema a aniquilar y/o combatir, sino como un beneficio incuestionable económica y productivamente hablando para el país vecino del norte. Sin embargo, es de sabios también reconocer que dicho problema atañe, en gran medida, a nuestros inútiles gobiernos incapaces de proveernos de trabajos dignos y bien remunerados. Gobiernos incapaces de dialogar y negociar viables y mejores soluciones, que construir estúpidas “fortalezas” de gruesos muros que en lugar de unirnos, hoy nos separan.

A lo que me lleva a cuestionarme: por qué hasta ahora dar solución al problema de migración, si éste ha existido desde siempre? O es la migración solo un pretexto para cercar sus fronteras para aliviar su TEMOR y MIEDO, Sr. Bush…?